Pobre España, pobres los españoles que sucumben y se dejan convencer por esta plepa de tecnócratas caducos, que de alguna manera quieren hacernos pagar el coste de esta crisis a los paganinis de siempre, enredándonos con las formulas mágicas que el Fondo Monetario Internacional recetó a nuestro aletargado gobierno para enmendar el rumbo de la nave. Conociendo el pelaje de estos poderosos oportunistas, se vislumbra el trasfondo de sus discursos y de sus intenciones... El futuro de bienestar de las familias trabajadoras corre el riesgo de no mantener una continuidad y una tranquilidad laboral. Tal vez se pueda crear más trabajo, sí; pero, ¿a qué precio? Trabajo precario y mal remunerado, otro paso para atrás. Se produce más incertidumbre, lo que reduce obviamente el gasto y el poder adquisitivo de las familias. No siempre es válida la misma fórmula para todos los estados, de sobra es conocida la brutalidad con la que
pretenden acometer la reforma laboral de pensiones, el gasto público, subida de impuestos... Para qué engañarnos, nuestros fatuos dirigentes, de una y de otra facción, acatan pautas asfixiantes que vienen de fuera, porque no tienen argumentos ni capacidad para crear trabajo productivo, no han querido o no han sabido hacer los deberes... Entonces, ¿qué podemos esperar de todos ellos? Pobreza..
Diario de Burgos 07-06-2010
Y ni siquiera crearon más trabajo y si lo que podría ser el reinicio de la esclavitud, que ya algunos aceptan a la alternativa de delinquir suicidarse o pasar hambre, no sería de extrañar que la delincuencia aumentase pues en la cárcel supongo que datan de comer y un catre donde dormir, como diría aquel siempre hay alternativas.
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